Carmen Posada hace una muy interesante reflexión sobre los aspectos negativos de los criticones profesionales en “Crítica al criticón”, pero creo que quedaron varias cosas por decir.
Es cierto que es muy jarto el criticón tipo Antonio Caballero a quien todo le parece malo, nada le gusta y parece que una nubecita negra lo siguiera permanentemente para lloverle sobre la calva. Pero me parece mucho peor el conformista o el lambón que todo lo ve rosado y con cariñositos saltando y arrojando pétalos de rosa por las calles, al estilo de José Obdulio Gaviria a quien todo lo que hace Uribe le parece MA-RA-VI-LLO-SO. La razón es que la situación del país no es la mejor y me parece preferible que esté alguien allí haciendo ver los puntos negros (de pronto así alguien los corrige) que haciéndose el loco o tapando los huecos con flores (si todo está tan bien, ¿para qué cambiar?).
Los roles en la sociedad
Pero hay quienes sostienen como Carmen que los criticones deberían más bien hacer algo constructivo y “denunciar formalmente” ante las autoridades o proponer opciones. Sin embargo esa no es la labor del ciudadano de a pie. Es decir, chévere si lo hace, sería lo ideal, pero no es la función que se espera que cumpla. Para eso están otros como los periodistas, que se nutren de lo que dice y opina la gente del común en la calle o en sus blogs para identificar una historia, confrontar a sus protagonistas y hacerles seguimiento a sus actuaciones con muchas mejores herramientas y criterio que el ciudadano del común (se supone). Recordemos que más de una vez han sido los escándalos que destapa la prensa los que estimulan las investigaciones de los organismos que se supone ya deberían estar haciendo ese trabajo como la Fiscalía, la DIJIN o el DAS. Y sin embargo, no falta el que dice que los periodistas no deberían meterse en eso porque entorpecen las investigaciones de los profesionales, quienes a su vez tienen mejores herramientas y criterio para identificar y procesar el material probatorio que un periodista (se supone).
Por otra parte, que un funcionario público o privado cometa un delito denunciable ante las autoridades no es la única razón para quejarse. Cuando un funcionario hace algo por lo cual sus representados le perdemos la confianza tenemos todo el derecho a quejarnos y a presionar para que sea cambiado por otro más idóneo. Como pasa cada año con el técnico de la Selección de Fútbol de mayores, como pasó con el Gobernador de New York o como debió pasar con Ernesto Samper por cuenta del proceso 8000. Si la gente no se queja, ¿cómo van a saber los políticos qué decisiones quieren sus representados que se tomen? Un ejemplo perfecto es el de los representantes en la Comisión Primera de la Cámara Miriam Paredes de Putumayo y Orlando Guerra de Nariño, quienes no votaron la Reelección de Uribe ante la presión de los ciudadanos de sus departamentos que están putos por la forma como el Presidente manejó la crisis de las pirámides.
De otro lado, es importante que la gente se queje de lo que piensa está mal como una forma de contrarrestar la propaganda oficial. Si yo no escucho a la gente quejarse del mal gobierno, pues entonces yo tiendo a creer que estoy mal si soy el único que opina de esa forma, más aun cuando el mal gobernante invierte grandes sumas de dinero en promover su buena imagen en lugar de hacerlo en el bienestar de sus gobernados, o por lo menos en cumplir lo que prometió para salir elegido. Entre más gente esté hablando de un problema o de un escándalo, más difícil es que lo tapen quienes tienen interés en mantener la situación igual y es más probable que se hagan cambios para que el problema se resuelva. Ese es el gran aporte del criticón.
Críticos o criticones
Obviamente yo prefiero que haya observadores críticos que criticones. La diferencia radica en que un crítico elogia lo bueno que ve y denuncia lo malo y lo feo que encuentra, con argumentos que sustenten su posición y enriquezcan el criterio de sus conciudadanos para formarse su propia opinión; al criticón todo le parece malo y porque sí. Pero así como no todos los habitantes del país estamos llamados a ser políticos, periodistas, o tan siquiera ciudadanos que realmente practican el ejercicio de la democracia participativa, tampoco podemos pedir que todos los criticones sean críticos.
Si en serio consideramos importante que hayan más políticos honestos, periodistas comprometidos con la verdad, ciudadanos empoderados con las herramientas de la democracia y observadores críticos de la sociedad, lo mínimo que deberíamos hacer es desempeñar lo mejor posible el rol que escojamos cumplir en la sociedad. Y para ser lo más consistente posible con las palabras de Gandhi (“debes ser el cambio que quieres ver en el mundo”), he sido lo mejor observador crítico que he podido, esperando que los demás desde los roles que han escogido hagan lo suyo para que esto se componga.
En todo caso, si tuviera que elegir entre criticón y el zombi que no dice nada por temor al qué dirán, me quedo con el criticón. ¿Y usted?
lunes, 29 de diciembre de 2008
Más criticones y menos lambones
miércoles, 24 de diciembre de 2008
Cómo ha cambiado diciembre
Diciembre es de esas épocas del año en las que todo se magnifica. Pero este año, además ha traído cosas que me tomaron por sorpresa.
Por ejemplo, es usual que en diciembre las impulsadoras se multipliquen, pero esta vez hasta trajeron refuerzos. A ver me explico: siempre me han causado profundo desasosiego las impulsadoras que lo abordan a uno en los supermercados, por lo cual trato de ubicar visualmente desde el pasillo lo que necesito para después llegar velozmente hasta la góndola, agarrar el producto sin hacer contacto visual y salir rapidito hacia el pasillo del otro lado antes de que tengan oportunidad de decirme algo. Con el tiempo he logrado desarrollar una habilidad de “entrada, extracción y salida” con tal precisión quirúrgica que hasta envidiarían los rescatistas de la Operación Jaque... pero en diciembre no es suficiente.
El sábado estaba tranquilamente haciendo cola para pagar en un supermercado, creyéndome ya a salvo de las impulsadoras que había logrado esquivar cual comando israelí, cuando un “Jo, jo, jo, joooo” gritado casi en mi oído por poco me hace dar un ataque. Lo que yo había creído un maniquí, resultó ser un tipo disfrazado de papá Noel, que me pareció todavía más siniestro que los payasos de porcelana o los tipos que se disfrazan de Barney en las fiestas infantiles.
Las sorpresas siguieron a la salida del supermercado: la verdad no me esperaba tanta gente comprando después de los oscuros pronósticos de CNN y Fenalco. Pero después de la caída de Wall Street y el desplome de las pirámides la mayoría de la gente siguió comprando como si nada, para gran alivio de los atracadores que estaban temiendo que les iba a tocar trabajar como a todos los demás para poder subsistir.
Caminando por el barrio, encontré fachadas tan recargadas de adornos luminosos que preferí caminar por la calle y no por el andén por miedo a que me cayera encima un reno gigante de fibra óptica. Además yo sospecho que Emcali no genera tanta potencia como para mantener iluminados los zoológicos enteros que vi encima de algunas casas y sus respectivos antejardines… ¿quién quita que estén usando una planta propia y que esa vaina explote si por accidente le cae encima un chorro de aceite destinado a la fritanga?
Llegando a mi casa, esperaba encontrar el habitual bullicio de música de carrilera, salsa y reggaetón mezclado con villancicos, pero me topé con la sorpresa de un potente equipo de sonido amplificando a grito herido ese tristísimo villancico que dice “Mamá, dónde están los juguetes”, conducta que debería estar tipificada en el código penal como no excarcelable. Hay villancicos para todos los gustos muy bonitos, alegres, enternecedores, etc. pero ¿a quién demonios se le ocurre poner a todo volumen semejante invitación al suicidio?
Pero bueno, también hubo sorpresas chéveres. Me gané el concurso de aguinaldo de La Mariposa en una reñida competencia donde debo agradecerle a una enorme chiripa haber salido elegido. Además mi mamá me regaló una camisa (la sorpresa está en que me encantó aunque la compró a gusto de ella) y me las arreglé para que el Darth Zokete me hiciera el favor de traer de Buenos Aires el último libro de Macanudo de Liniers.
Aunque la mejor sorpresa fue que tanta gente querida haya venido a pasar navidad acá, especialmente mi hermana que se pegó tremendo viaje desde Sao Paulo. Que la gente todavía haga esos esfuerzos son la mejor sorpresa de esta época, pero tengo que reconocer que al ingenio de mi primo para los regalos no le gana nadie.
miércoles, 10 de diciembre de 2008
¿En qué se parecen Pablo Ardila y Juan Carlos Abadía?
Por cuenta del artículo “¿Juan Carlos Abadía mejor gobernador del país? ¡La chimba!” me escribió un lector inconforme, cuyo mensaje adjunto al final de esta entrada.
Saludos Sr.Pava.
En primer lugar agradezco la forma tan respetuosa y en la que usted plantea su posición y que se haya tomado el tiempo para expresarla en lugar de simplemente quedarse en el comentario de pasillo. En la misma forma, le agradecería reflexionara sobre lo que tengo qué decir acerca de sus palabras.
Yo soy el autor de "La cantera de palabras" y nada tengo qué ver con el email cadena al que hace referencia. Simplemente me identifiqué con el espíritu del grupo de facebook “Mamado de Abadía” y publiqué ahí el enlace a mi artículo que me pareció pertinente. Hasta ahí llega mi relación con el grupo y con su creador (a quien no conozco).
Por otro lado, lo que publiqué en el artículo de mi blog es solamente lo que se ha hecho público en diferentes medios, por fuentes dignas de crédito y no únicamente rumores. Por mi parte he hablado con varias personas (no una ni dos, sino más de 10) que han sido testigos de los malos manejos en contrataciones del actual gobernador, pero en la medida en que no tengo pruebas y sólo cuento con su testimonio, sería irresponsable hacerlos públicos, incluso en un simple artículo de opinión. Pero que sirven como indicio para reforzar las percepciones causadas por actuaciones públicas del gobernador, sirven. Es más, si usted quiere, llame al despacho del gobernador, y se dará cuenta de quién atiende los asuntos de contratación. Me cuenta si es Juan Carlos Abadía. Llame y compruébelo por usted mismo.
Por esta razón me parece importante cuestionar la transparencia de este personaje. No es un simple afán de hacerle daño a la imagen del Valle basado únicamente en rumores (que siempre los hay, independientemente de que sean fundados o no), sino en MUCHOS indicios, investigaciones del las autoridades competentes y las mismas actuaciones públicas del funcionario. Daño le haríamos al Valle si permitimos que este sujeto haga y deshaga y después salga todo a la luz y en el resto del país nos señalen como unos indolentes o unos idiotas que nunca hicimos nada a pesar de los fuertes indicios.
Pero listo, asumamos con su buena fe que el gobernador es transparente en todas sus actuaciones. ¿No le parece por lo menos desacertado el manejo que le dio a la campaña de los juegos nacionales? Hasta ahora no he encontrado ni un solo vallecaucano que no esté indignado por el hecho de que este sujeto haya gastado $1500 millones en una campaña innecesaria. Claro, hay que promover al Valle y debe haber presupuesto para eso, ¿pero $1500 millones? ¿Es que estamos muy bien económicamente? Aunque a mí y a todos con quienes he consultado este solo hecho nos parece escandaloso, ¿no le parece por decir lo menos indelicado que él se haya puesto en primer plano por delante de los medallistas olímpicos?
Si usted va a promover una región no usa la imagen del funcionario de turno. Y se supone que se trataba de promover al Valle porque la plata salió del presupuesto de la Gobernación del Valle y no del bolsillo de Juan Carlos Abadía o de su papá o de su amigo Juan Carlos Martínez, el oscuro (y no es un chiste racista) senador que lo acompaña desde hace años. Ni siquiera Uribe que es tan hábil en el manejo mediático ha sido tan indelicado. Cuando la Presidencia trata de promover a Colombia, usa el sombrero vueltiao, el logo de Colombia es Pasión, Juan Valdéz, etc. y no la cara del mismo Uribe así lleve ya seis años largos en el poder y la mayoría de los colombianos tengan una imagen favorable de él por encima del 70%.
¿Sabe a quién me recuerda el gobernador en esta actuación particular? Al hoy destituido gobernador de Cundinamarca que fue detenido a finales de 2007: Pablo Ardila usó publicidad de su periódico El Espacio para promover su imagen personal. Usted dirá que está en su derecho para usar la plata de su empresa como le parezca mejor. El problema está en que como se suponía que era una campaña del periódico y no una campaña política, pues evadió los topes que exigen el Consejo Nacional Electoral a la publicidad de políticos. Fíjese en las épocas de elecciones, y verá que aunque haya muchos afiches y pasacalles ilegales en las calles, rara vez un candidato pone más de las tres vallas que le permite la ley, porque son más difíciles de justificar. En este caso de la campaña de los juegos nacionales, Abadía logró posicionar SU IMAGEN PERSONAL (no la imagen del Valle porque no había nada en la foto que remitiera al Valle, una bandera, un paisaje, un monumento, ALGO) más allá de los sueños de cualquier político, a nivel nacional y regional camuflado en una campaña institucional, que precisamente por su origen no está regida por los topes a los que deben someterse todos los políticos. ¿A usted eso le parece correcto? ¿Le parece un manejo ético?
Si es así, le agradecería como vallecaucano que me saque de mi error y sustente en qué contexto lo que hace Abadía no merece, como mínimo, las suspicacias de sus gobernados. Si usted cree que la culpa de la mala imagen del Valle es exclusivamente de los criticones y que sus gobernantes no tienen absolutamente nada qué ver, le agradezco que me lo sustente. Yo creo que la imagen de Cali mejoró un poquito cuando logramos que destituyeran a Apolinar Salcedo, en lugar de quedarnos callados por temor al qué dirán. Pero claro, esa es sólo mi opinión y le agradecería enormemente que me sustentara por qué estoy equivocado.
Gracias, Andrés Meza-Escallón
La comunicación del lector:Si este es el email del creador del grupo de facebook "Mamado de Abadía" o el ecritor del blog "la cantera de palabras" este mensaje es para vos....
La verdad me parece absurdo el email cadena ke esta rodando por ahi promocinando el grupo y criticando al actual gobernador de los vallecaucanos.
primero, dice muchas cosas ke estan mal fundamentadas, muchas suposiciones y hay cosas ke se dicen solo como por criticar o ke no vienen al caso.
Me parece ke estas criticando por criticar, alegando solo por llevar la contraria, esas personas ke no estan de acuerdo con nada.... siempre en contra del gobierno, pero no piensan el verdadero daño ke hacen a la comunidad... hay personas ke no procesan lo ke leen y creen todo lo ke ud escriben. Al decir babosadas de alguien ke en verdad no conoces, lo unico ke estas haciendo es perjudicar la imagen de esa persona.
Asi sea una frase cliché, "por eso es ke estamos como estamos", muchas veces los colombianos y sobre todo los caleños nos dedicamos a criticar por criticar, sin pensar positivamente, estoy seguro ke no has hecho el menor esfuerzo por comunicarte con el gobernador y plantearle tus dudas, o por lo menos con algun diputado, o asi sea el personero....
Esos grupos, esos emails cadena, esos blogs y esos comentarios, lo unico ke logran es empeorar la imagen de nuestra region ante todo colombia y ante las otras regiones.
Yo personalmente no tengo nada ke ver con el gobernador, simplemente me molesta ke hablen mal de la region y sobre todo lo hagan de manera publica. Yo tambien lei la noticia en el periodico donde dice ke abadia es de los mejores gobernadores y aunke no este muy seguro ke tan fiable sea esta informacion, me parece excelente ke los vallecaucanos hayan apoyado a su actual gobernante. Lastima ke personas como vos empeoren la imagen ke tiene el valle actualmente.
Pensalo...
suerte.
Han Yu Pava
lunes, 8 de diciembre de 2008
¿Abadía mejor gobernador del país? ¡La chimba!
Cuando Juan Carlos Abadía ganó las elecciones a la Gobernación del Valle yo no estaba en el país. Pero ni siquiera la distancia pudo evitar que en la helada casa de Homestead la noticia me diera escalofríos: los votantes acababan de invitar al zorro al corral supuestamente para cuidar las gallinas. Bueno, hay que darle el beneficio de la duda, me dije, puede que tanto rumor sea exageración. Pero casi un año después, ya no me queda la menor duda: mis coterráneos llevaron a un velocirráptor al corral de las gallinas. Mi profunda desconfianza tiene varias causas:
Los antecedentes
En primer lugar, quienes lo rodean no son precisamente monjitas de clausura. El papá, Carlos Herney Abadía Ocampo fue condenado por el proceso 8000 y además se voló de la cárcel, mientras muchos de sus apadrinados políticos fueron condenados por el escándalo de la para-política. Por otro lado está Juan Carlos Martínez, senador que controla una red de influencias que llega a varios departamentos y a los presupuestos de grandes entidades. Está vinculado a varias investigaciones y varios de sus apadrinados han sido destituidos o investigados por grandes irregularidades en contrataciones. Pero bueno, uno no es responsable por lo que hagan su familia o sus amigos.
Sin embargo, el propio Juan Carlos Abadía cuando fue presidente del Concejo de Cali, se enfrentó al alcalde Ramiro Tafur (el único alcalde decente que ha tenido Cali en más de 15 años) por un contrato de más de $1.000 millones. El zar anticorrupción acabó respaldando al alcalde, y el contrato defendido con tanto entusiasmo por Abadía quedó congelado por irregularidades investigadas por la Fiscalía, la Procuraduría y la Oficina del Zar Anticorrupción. Aquí ya no podía echarle la culpa a la mala fama del papá.
Ya en plena carrera electoral por la Gobernación, una granada explotó en una de las sedes de la campaña de Abadía, pero sin causar mayores daños ni saberse de algún grupo terrorista que se adjudicara el atentado. Como raro, ¿no? Incluso para el comandante de la Policía de ese entonces “es una actitud de alguien que quiere causar daño pero que no sea tan grande y que de todos modos genera una noticia”. Abadía le sacó provechó al despliegue mediático con un sentido de la oportunidad tan milimétrico, que a muchos nos dejó la sensación de que fue un auto-atentado para mostrarse como un perseguido por los malos. Eso en la mente de los electores significa que si a uno lo persiguen los malos, entonces debe ser porque uno es de los buenos, ¿no?
En la Gobernación
Ya siendo gobernador del Valle, me llamó mucho la atención cuando abandonó un proyecto educativo y cultural en las antiguas bodegas de la Licorera del Valle. Listo, el proyecto no estaba terminado, pero al parecer prefirió botar a la basura $24.000 millones que invirtió la administración anterior con tal de disponer del presupuesto que faltaba por ejecutar en otras cosas por las cuales sí pudiera llevarse el crédito. Como por ejemplo una oficina para su esposa.
La otra espinita que había aguantado para sacarme es la amplísima difusión con la que anunció que gracias a él se había llegado a un preacuerdo entre los corteros de caña en huelga y los ingenios. Generosos (y costosísimos) avisos de prensa dieron cuenta de la titánica obra, para ver que el acuerdo sólo se logró un mes después y gracias a la negociación directa entre las partes. Que se felicite él mismo por hacer su trabajo ya es medio enfermo, pero que se gaste la plata del Departamento en anunciar lo que no hizo, ya es pasado.
Pero la tapa, es la campaña de los Juegos Nacionales que muestra al gobernador en primer plano, en sudadera roja, con los dos medallistas olímpicos del Valle en Eucoles y vallas en varias ciudades del país promocionando que ellos tres están preparados. ¿Qué salgan los medallistas? Maravilloso. ¿Que salgan los funcionarios responsables del deporte en la región y de la organización de los Juegos en segundo plano detrás de los medallistas? Aguanta. Pero que salga Abadía en primer plano no sólo me parece de mal gusto sino un robo al erario público. Si se trataba de promocionar la imagen del departamento debería mostrarse lo que representa al departamento, y no a un funcionario que disfraza de campaña institucional el posicionamiento de su imagen personal sin los topes que exige el Consejo Nacional Electoral a la publicidad de los políticos. Este señor se gastó alrededor de $1.500 millones en una campaña considerada innecesaria y exagerada, más teniendo en cuenta que sólo tres meses antes el Departamento estuvo a punto de no poder participar en los Juegos porque faltaban $3.500 millones.
El colmo del descaro
Pero ya entrado en gastos, parece que su descaro no tiene límites. Mi mamá me dijo que había visto anuncios en prensa que decían que Juan Carlos Abadía era ¡¡¡¡el mejor gobernador del país!!!! No es crea que mi mamá esté mintiendo o se haya confundido, pero necesitaba corroborar semejante atentado contra el sentido común. Me puse a indagar y resulta que Invamer Gallup hizo una encuesta acerca de TRES gobernadores del país, en la cual Abadía sacó un porcentaje de favorabilidad del 68% y los gobernadores de Antioquia y Atlántico sacaron 63%. Como lo señala Diego Martínez Lloreda, “la encuesta de Invamer sólo midió la favorabilidad de tres de los 32 gobernadores que existen en el país. Por lo tanto, salir a proclamar, con base en esos datos, la superioridad de Abadía sobre sus colegas del resto del país, es, además de una falta de respeto con sus pares, una verdadera temeridad”. Ni siquiera Uribe, tan hábil para manipular la presentación de las cifras a su conveniencia, ha sido tan descarado.
Mi impresión es que Abadía busca desesperadamente proyectar una imagen de dirigente exitoso para opacar las suspicacias que generan su oscura familia y sus padrinos políticos. Como el nuevo rico que trata de llamar la atención con la ropa más cara, los carros más costosos y las rumbas más estrafalarias para que la gente se olvide de que alguna vez fue pobre. Allá él. Pero que nos devuelva a los vallecaucanos la plata que salió de nuestros impuestos y que él está despilfarrando en brillar una olla que desde lejos huele a podrido.
sábado, 15 de noviembre de 2008
¿Blogs periodísticos? ¡Qué contradicción!
Miando fuera’el tiesto
Supongamos que hay un niño que no responde preguntas y se consulta a tres expertos para que lancen hipótesis sobre por qué no lo hace. Seguramente pasaría algo como esto: un otorrino dirá que tiene problemas auditivos, un neurocientífico dirá que tiene un trastorno cognoscitivo y un psicólogo dirá que tiene problemas con la autoridad y por eso no le da la gana de responder. Posiblemente el niño simplemente hable otro idioma y no entiende lo que le están preguntando, pero el punto es que cada experto verá el problema desde la óptica de su disciplina sin que necesariamente llegue a comprenderlo correctamente. Otra historia sería si cada uno de los expertos tiene la oportunidad de examinar al niño y hacerle pruebas, porque al menos de esta forma podrán descartar que el problema esté dentro de su especialidad y lo remitan a otro experto hasta que alguno le pegue (al problema, no al niño). Siguiendo este mismo ejemplo, creo que para entender un fenómeno hace falta hacer parte de él, untarse.
Por eso me pareció interesante que en su blog Gustavo Vargas hiciera una recopilación de las opiniones de diversos académicos sobre los blogs como alternativa periodística. Chévere como referencia y punto de partida, pero me hubiera gustado conocer además qué piensa un periodista que haga el ejercicio juicioso de habitar la blogósfera.
En mi opinión, los blogs son un fenómeno completamente aparte del periodismo, ya que la inmensa mayoría de los contenidos que hay en la blogósfera no son periodísticos. Por eso choca un poco que hagan lo que haría un abogado acostumbrado a escribir minutas a máquina y que de repente se la cambien por un computador: usarlo solamente para seguir escribiendo minutas, pero ahora con la opción de editar antes de imprimir. En el caso de la blogósfera, tal vez muchos periodistas se vean atraídos porque pueden saltarse una parte del proceso periodístico, lo cual les da la velocidad, oportunidad y autonomía que no tienen en un medio tradicional.
Los expertos no usan recetas
Hay periodistas tradicionales que dirán que el proceso periodístico es el que de alguna forma garantiza la calidad del producto final. Pero yo creo que el papel del proceso está un poco sobrevalorado. Como solía decirme un consultor que también es bloguero “desde que aprendí a cocinar, no volví a seguir recetas”. Las recetas están hechas para que CUALQUIERA pueda obtener un resultado aceptable, pero NINGUNA receta le va dar el mismo resultado que obtendría un chef experto. Claro, habrá quienes encuentren reconfortante entrar a un McDonalds en Corea o en Bangladesh donde la comida local puede ser demasiado exótica o por debajo de los estándares sanitarios a los que están acostumbrados: uno sabe que se va a comer un pedazo de cartón, pero también que el proceso estandarizado garantiza que va a ser exactamente el mismo pedazo de cartón que encuentra en París, New York o Bogotá.
El experto puede darse el lujo de experimentar constantemente para estudiar la reacción de su público y hacer rápidamente ajustes que los satisfagan. Esto también implica que su audiencia nunca va a ser tan grande como la de un medio masivo que maneje contenidos estandarizados, tanto en qué dicen como en cómo lo cuentan. Pero yo creo que una vez ese público selecto encuentra un experto que les guste, habrán dado con alguien que los satisfaga más que el principiante que se ampara en un proceso, al cual seguramente recurrirán de vez en cuando. Claro, por cada blog “bueno” donde se exprese un experto habrá cien que son basura, pero en la medida en que la gente no vuelva ni recomiende esos blogs por malos no serán visibles y desaparecerán.
Del medio tradicional al blog
Por otro lado, el medio masivo le apostará a los formatos y contenidos que sean atractivos para la mayor cantidad posible de público, mientras que la fuerza de los blogs está en ser devotos de formatos y contenidos que sean muy atractivos para unos cuantos fanáticos. Pero dado que la dispersión geográfica de ese público es irrelevante gracias a Internet, pues esos cuantos fanáticos no tienen por qué ser poquitos: de 10 en 10 en cada país que hable la lengua del que escribe, se va formando una audiencia que ya quisieran algunos canales de televisión y periódicos regionales.
Y por último, un blog personal o colectivo se mantiene simplemente porque al autor le nace. En cambio el periodista en un medio tradicional vive de su trabajo como redactor. Por eso está sujeto a no hablar mal de los anunciantes o de fenómenos que indirectamente son propiciados por quienes pagan su sueldo con la pauta. Y ni hablemos de política, porque aparte de Daniel Coronell y Félix De Bedout es más bien raro encontrar periodistas que se arriesguen a cuestionar de frente a los políticos y gobernantes porque son los amigos de sus empleadores. En cambio en la blogósfera es más bien común que la gente se exprese sobre los actores que afectan su vida cotidiana, ya se trate de gobernantes o empresarios. Y obvio que van a haber quienes den rienda suelta a especulaciones sesgadas sin ningún fundamento (quienes serán abandonados por quienes prefieran un ‘opinador’ que tenga cómo sustentar sus posiciones), pero incluso estos le darán gusto a quienes buscan otros que tengan las mismas posiciones subjetivas y sin fundamento para ‘darse pedal’ entre ellos.
Conclusión
En la medida en que la mayoría de los blogs no siguen un estricto proceso periodístico no puede decirse que estén haciendo periodismo. Están haciendo otra cosa, tal vez más interesante, pero no periodismo. Pero al no estar sujetos a sus mismas restricciones inherentes al periodismo, permiten que salgan a la luz innumerables mutaciones, muchísimas malas, pero también algunas interesantes. Y sólo por la posibilidad de encontrar esas mutaciones interesantes es que me parece que en la blogósfera vale la pena meter el pie, o por qué no, sumergirse.
domingo, 9 de noviembre de 2008
¿Dónde se metieron las mujeres en Cali?
Hay una dinámica que hace parte del arsenal de toda psicóloga organizacional, y es el juego de las sillas. Se trata de juntar ‘n’ personas y ponerlas a dar vueltas alrededor de ‘n-1’ sillas al son de la música. En cuanto para la música, los participantes hacen lo que sea por apoderarse de una de las sillas. Quien no logre sentarse sale del juego, el cual vuelve a empezar con una silla menos hasta que queda sólo un participante: el ganador del juego.
Durante muchos años yo sentí que en esto de las relaciones estaba jugando un juego muy similar al de las sillas, donde los que iban saliendo eran los amigos y amigas que se iban casando. Y sentía que iba ganando. Pero ahora que corro el riesgo de “ganar” el juego (porque hasta el impredecible de Porras se va a pegar el viaje hasta Xalapa a casarse) me doy cuenta de que parezco ser el único que está todavía jugándolo.
A veces me pregunto ¿dónde demonios se metieron las mujeres en esta ciudad? Pero bueno, tal vez no estoy siendo lo suficientemente específico. Dado que hace muchos años no salgo con ninguna mujer mayor de 25 años (de hecho parece que todas las mujeres en Cali tuvieran 25 años), la verdadera pregunta sería ¿dónde demonios se metieron las mujeres de entre 26 y 32 años, profesionales, “bonitas” e “interesantes”? ¿Y solteras? Y sé que existen porque conozco por lo menos una (que no me pare bolas ya es otro problema distinto).
El juego de las cifras
Vamos por partes. Según la proyección del Dane para la población de Cali en 2009, seremos 2’158.107 habitantes, de los cuales 51.2% son mujeres. Eso nos deja que hay aproximadamente 1’104.000 en Cali. Como no es tan fácil determinar cuántas de ellas son mayores de 25 años, podríamos aventurar que son aquellas que alcanzaron un título profesional. Teniendo como base el censo del 2005 podemos extrapolar que los niveles de escolaridad actuales son más o menos así:
Nivel máximo de escolaridad alcanzado | |
10,5% 37,2% 31,7% 12,3% 7% 1,3% | ninguna hasta completar primaria hasta completar bachillerato hasta tecnólogo hasta profesional hasta posgrado |
Juntando a profesionales con las magísteres y doctores, tenemos el 8,3% de la población (con razón dicen que somos privilegiados). Coincidencialmente, casi la totalidad de la gente que yo personalmente encuentro interesante es también profesional y está optando por algún tipo de título de posgrado, con lo que muy chambonamente podría estar satisfaciendo también el criterio de “interesante”. Sin embargo hay un problema: durante muchos años las mujeres fueron la minoría en las universidades. Pero como ahora en casi todas las carreras las mujeres son mayoría y en los últimos años ha habido un aumento sustancial de la población, creo que se emparejan las cifras. Por eso me atrevo a especular que más o menos el número de mujeres profesionales (y por lo tanto mayores de 25 años e “interesantes”) son ese mismo 8,3% del 51.2% de la población, es decir 91.700.
Ahora toca definir cuántas de ellas siguen solteras, es decir que no se han casado ni tienen una relación estable. Arbitrariamente podría decir que una de cada 20 mujeres es soltera (5%), lo que nos deja con una interesante cifra de 4585.
Queda el reto de filtrar por el criterio de las “bonitas”. Aquí la vaina es bien subjetiva, pero tratando de definir lo que para mí significa “bonita” podría decir más bien “razonablemente atractiva” que se trata de que no sea ni muy gorda ni muy flaca, ni muy alta ni muy chaparrita, ni muy plana ni muy operada, ni con la cara de Carolina Cruz pero tampoco con la de Teresa Gutiérrez. Asumiendo que la mayoría de las bonitas están en el grupo de las casadas o en relación estable, muy arbitrariamente podemos aventurar que hay un 10% que siguen solteras por decisión personal o porque son bonitas que están en estado de transición (es decir, que acaban de salir de una relación estable pero no descartan volverse a involucrar sentimentalmente en el corto/mediano plazo). Eso nos deja con el 10% de 4585, es decir 458, el 0,021% de la población de Cali.
Ahora falta ver a cuántas de ellas conozco. Aplicando la proporción de mujeres profesionales a mis contactos de facebook, el 4,2% de 393 da 16. Esto significa que de las 458 habría en teoría 441 mujeres profesionales, mayores de 25 años, razonablemente atractivas y solteras en Cali que todavía no conozco. ¿Entonces dónde se metieron?
Las hipótesis
La primera hipótesis es que en la universidad hay muchísima visibilidad que se pierde cuando uno se gradúa. Desde el colegio uno anda con sus compañeros de clase y sus amigas son una que otra vecina más las compañeras de la hermana que estudia en otro grado o incluso en otro colegio. La cosa cambia cuando uno llega a la universidad, donde se conoce gente de todos los colegios y se revuelven todos con todas (por eso parece que todas las mujeres en Cali tuvieran 25 años). Pero cuando uno sale a trabajar, vuelve y se encierra en el reducido círculo de los compañeros de trabajo que todavía no se han casado.
La otra es que uno en la universidad es más bien fresco y se apunta a cualquier plan, lo cual cambia cuando se empieza a trabajar. Por eso varias amigas decían que el novio ideal en la universidad es un estudiante de Biología, ya que son los duros para los paseos y las salidas de campo al Pacífico, avistamientos de ballenas, conseguirse permisos para ir a la Ensenada de Utría, etc. Sin embargo, el novio biólogo se va volviendo un encarte cuando vive con lo del bus (si es que encuentra trabajo en su área después de graduarse) mientras que la novia ya empieza a ganar un buen sueldo y a armar con sus compañeros de trabajo planes en México, Europa o por lo menos Cartagena. Entonces sospecho que después de mi espectacular quiebra en 2005 ya no volví tener acceso a esos planes que sólo pueden pagar los profesionales de mi edad. Por eso aunque existan, ya no las encuentro en los sitios a los que suelo ir (y que puedo costear).
¿Alguna otra hipótesis?
Datos del DANE sobre la población soltera en Bogotá del censo 2005
jueves, 30 de octubre de 2008
Purga en el ejército: ¡gracias Obama!
Casi no lo creo. Por andar entregando un proyecto me desconecté dos días y me perdí uno de los anuncios más trascendentales que ha hecho el Gobierno Uribe: la purga de 27 oficiales del ejército de todos los rangos por los macabros falsos positivos en diferentes regiones del país. Este anuncio es un claro contraste con la actitud matona y pendenciera con la que este mismo personaje recibió las denuncias de Human Rights Watch sobre su supuesta obstaculización de la justicia, sin siquiera haberlo leído. Me parece muy interesante que este Gobierno haya tenido la entereza de reconocer que estos militares, en el mejor de los casos, son responsables de negligencia y que haya decidido hacerlo tomando medidas drásticas, dando la cara. Eso es lo mejor que se puede hacer para mantener nuestra confianza en unas fuerzas armadas a cuyo sacrificio y dedicación les debemos tanto: punto para Álvaro y para la campaña de Juan Manuel.
Sin embargo, yo me pregunto si este no sería un caso similar al de Wilson Bueno (alias Isaza), el guerrillero que ayudó a Óscar Tulio Lizcano a volarse de las Farc. Se especula insistentemente que su motivación no fue un sentimiento altruista o de compasión hacia su prisionero, ni siquiera ambición por la jugosísima recompensa o el tratamiento de héroe que le está dando Uribe (con una insistencia por robar cámara y un afán por armar polémica que recuerdan sus mejores cortinas de humo). Yo también me inclino a pensar que este guerrillero la vio negra al sentir en la nuca al Ejército y razonó que tenía más posibilidades de salir vivo con un rehén valioso, perdón, con un liberado, que si esperaba a que lo liquidaran los militares en un intento de rescate o sus propios comandantes ante un segundo golpe como el de la operación Jaque. En otras palabras, el tipo no liberó a Lizcano por convicción sino porque le tocó.
Creo que pasó igual con el cambio de actitud del Gobierno hacia las denuncias por violaciones a los Derechos Humanos por parte de algunos miembros del Ejército: no se debe a que sinceramente haya cambiado su política de obtener resultados en el corto plazo a cualquier precio, sino a que empezó a sentir la presión de arriba. Efectivamente, la política de seguridad de Uribe es posible gracias a su compadre hacendado George W. Bush, quien lo apoyó con relaciones públicas y recursos (que, a lo bien, necesitamos desesperadamente) en contra de las cejas levantadas de la Unión Europea, las ONG y nuestros propios vecinos. Pero ahora que las encuestas dan como virtual ganador en las elecciones presidenciales gringas a Barack Obama, este apoyo puede no seguir.
A juzgar por lo que dijo el candidato azul sobre el TLC en el último debate, no apoyaría a un gobierno que no incluye suficientes garantías de protección de los derechos laborales en un país como Colombia, donde se asesina a muchos líderes sindicales. Ojo, eso no significa que allá crean que Uribe o sus subalternos estén halando el gatillo, pero sí que no están lo suficientemente motivados para darle prioridad a resolver el problema. Hay quienes piensan que esas muertes son efectos secundarios inevitables de la aplicación de la política de “seguridá democrática”, pero yo me resisto a aceptar que sea así.
De todos modos, así como pasó con Isaza, prefiero que se haya tomado la decisión correcta a que se haya tomado la incorrecta independientemente de la motivación. Que el Gobierno deje de hacerse el ofendido y a tratar de terroristas a quienes cuestionan sus métodos, ya es un avance gigantesco. Ojalá siga así, independientemente de quién esté apretando las tuercas desde la Casa Blanca.
Caricatura: Daryl Cagle
domingo, 26 de octubre de 2008
Por qué son importantes el rescate de Oscar Tulio Lizcano y el Premio de Ingrid Betancourt
Cuando los envidiosos no hacían otra cosa que ponerse verdes de la rabia ante la postulación al Nobel de Paz para Ingrid Betancourt en lugar de acordarse de los secuestrados que siguen pudriéndose en la selva, llegó la noticia de que el ex senador Oscar Tulio Lizcano se le voló a las Farc.
Me encanta que este ex secuestrado haya escapado junto con uno de sus captores de las garras de la guerrilla. Obviamente me alegra por él y por su familia porque ya su salud estaba tan golpeada que quién sabe cuánto más hubiera sobrevivido en esas difíciles condiciones. Pero también es interesante la experiencia de Lizcano porque se convierte en un símbolo de resistencia ante la terquedad de las Farc, que quieren imponer su voluntad por encima de cuanta manifestación, marcha y señal de repudio hacemos los ciudadanos (no todos los que tiene cédula, pero sí la mayoría de los que vivimos en las ciudades y tenemos facebook).
Los símbolos como éste son importantes porque llaman la atención del público sobre la situación del protagonista de la noticia. Si uno se pone a ver, Nelson Mandela no es que hubiera hecho mucho fuera de vivir alojado con todos los gastos pagos durante años en una cárcel Sudafricana. Rigoberta Menchú no logró ningún acuerdo de paz ni detuvo el genocidio del que era víctima la población vulnerable de Centroamérica. Y ni hablar de Al Gore, que no ha bajado ni un grado el calentamiento global ni disminuido ni un gramo la producción de CO2. Y sin embargo les dieron el Premio Nobel de Paz. ¿Por qué? Pues porque darles ese galardón equivale a visibilizar el problema tan tenaz contra el que están luchando los homenajeados, hacer que la gente se interese por el tema y se pregunte por qué ocurre y qué pueden hacer para ayudar a solucionarlo.
Por eso no sé si reír o llorar por la alegría de mis compatriotas cuando se supo que el Nobel de Paz no se lo iban a dar a Ingrid sino a Martti Ahtisaari. Sin duda Ingrid como cualquier persona junto con sus virtudes tiene también muchos defectos. Sin embargo, sospecho que el único defecto que no le perdonan es que siendo ella tan hábil para manejar las relaciones públicas internacionales, no demuestre un fanatismo ciego hacia Uribe que le ayude a mejorar su imagen en Europa (la de él). Claro, como a nadie con medio dedo de frente se le ocurriría postular a Uribe para el Nobel de Paz, les hubiera parecido el colmo que se lo dieran a Ingrid, que porque “ella no ha hecho nada por la paz”.
¿Y? Yo prefiero que a través de reconocimientos como el del Nobel o el del Premio Príncipe de Asturias a la Concordia se haga visible la situación por la que pasó la ex candidata presidencial y la de miles de compatriotas que siguen presos en el monte (tanto los secuestrados como los guerrilleros rasos que preferirían desertar). Y que yo sepa, es la única que en los foros sobre terrorismo como el de la ONU ha hablado con sensatez al pedir que se incluya el diálogo en la estrategia para luchar contra el terrorismo. Y también le ha recordado al mundo que los secuestrados son más que excusas para que Juan Manuel Santos salga en la foto y que los secuestradores son, más que unos hijueputas terroristas irracionales, seres humanos que en su retorcida lógica creen estar haciendo lo correcto. “It is most important to stress that, when we talk about victims of terrorism, we’re talking about human suffering. We are not statistics, we are not numbers, we are people who suffer” dijo Ingrid Betancourt ante la ONU en septiembre de 2008.
Así que entre que le den premios y que no se los den (porque supuestamente “no ha hecho nada”), yo sí prefiero que se los den. A ver si así los que alimentan la guerra desde fuera se ponen a pensar en las muchas vidas que están afectando con sus acciones.
Foto REUTERS
jueves, 16 de octubre de 2008
Contraindicaciones cuando uno está en la mala
Muchos que no hemos tenido tendencias suicidas en ocasiones hemos estado tan, pero tan achantados que la idea de acabar nuestra existencia subiendo a un Paparayo 9 recién almorzados o acudiendo a la sala de urgencias de un hospital estatal no suena tan descabellada. Pero quisiera aquí proponer ciertos elementos motivacionales que definitivamente deben mantenerse fuera del alcance si uno está en la mala:
- Contraindicado escuchar No me pidas que no sea un inconsciente, pero la versión desgarradora de Niña Pastori. Si es la original de Calamaro, hay lágrima garantizada pero no peligra la vida del paciente.
- Ni se les ocurra alquilar La tumba de las libélulas (Grave of the fireflies). En lugar de uno acaban siendo dos o más los que se tiren por la ventana.
- Absolutamente prohibido leer la denuncia de Human Rights Watch sobre la obstaculización de la justicia por parte del gobierno de Uribe. Además de profunda depresión, da un sustico todo frío y profundo saber que alguno de los dos está mintiendo y quién sabe para proteger qué intereses.
- Prohibido leer Cien Años de Soledad. Si el paciente ya lo empezó, por ningún motivo permita que llegue más allá del penúltimo capítulo.
- Debería ser castigado con cárcel que alguien ponga a todo volumen ese villancico que dice “♫ mamáaaaa, dónde están los jugueteeeeeesss ♪”, sobre todo si es diciembre y el paciente ya tiene la pupila en remojo.
¿Otras contraindicaciones?
martes, 23 de septiembre de 2008
Mis cinco hábitos extraños
Siguiendo el ejemplo de Bailarina, aquí van mis cinco hábitos extraños.
- Cuando leo el periódico empiezo a leerlo por la última página y sigo en ese orden hasta la primera. Me encanta llevarle la contraria a los diseñadores editoriales de los periódicos porque así encuentro cosas inusuales que no vería si viera el periódico como ellos lo vieron.
- Siempre trato de tener un repuesto de más en la alacena para cuando se me acabe el desodorante, el jabón, la crema dental, etc. Así, en el peor de los casos, me quedo sin repuesto pero no sin con qué espantar ese día el olor a dragón en huelga.
- Cargo en el bolsillo derecho del jean una libretica vieja y arrugada donde apunto de todo, desde una idea para un blog hasta las direcciones IP del servidor DNS de mi proveedor de internet.
- Al montarme en un bus o buseta, busco sentarme antes del segundo eje para que cuando el primate que conduce nos pase a toda velocidad por un hueco, no salir despedido por los aires gracias a la suspensión trasera.
- Siempre que llamo a alguien, incluso al celular, saludo “Hola, hablas con Andrés Meza”. Todos sin excepción se burlan porque tienen identificador de llamadas, pero las tres veces que no lo he hecho, me preguntan “¿Con quién hablo?”.
¿Cuáles son los tuyos?
domingo, 14 de septiembre de 2008
¿Censura a los blogs en Colombia?
El pasado 25 de agosto una amiga bloguera de Cali me dijo que no podía entrar a los blogs de blogspot.com que ella acostumbra leer. Como yo desde mi casa podía entrar a esos blogs sin problemas, concluimos que blogger.com (la plataforma de blogs más usada en el mundo) funcionaba normalmente y más bien era un problema de acceso desde la oficina de ella. En su indignación, mi amiga alcanzó a especular que de pronto los de sistemas de su oficina le hubieran bloqueado el acceso a los blogs. Y como hay empresas que bloquean el acceso a hi5, Messenger y facebook, pues no sería raro que en este caso hayan decidido hacerlo con blogger.com
No volví a pensar en eso hasta que otra amiga, pero esta vez de Bogotá, me dijo ese mismo día que no podía entrar a este blog. Ahí sí entré en pánico. Le comenté que una amiga de Cali tenía el mismo problema, así que era demasiada coincidencia como para pensar que en dos empresas distintas en ciudades diferentes hubieran bloqueado el acceso a blogspot justo el mismo día. Eso tenía que ser un problema del proveedor. Así que les indiqué a las dos por MSN y GoogleTalk cómo hacer una traza de los servidores por los cuales pasaba su conexión a ver si determinábamos dónde era que se caía.
Si quiere hacer el experimento con su conexión, en Windows vaya al menú Inicio y escriba la palabra “cmd” en “Ejecutar Programas” si es XP, o en “Iniciar búsqueda” si está padeciendo Vista. En la ventanita de fondo negro que se abre, escriba “tracert apoloduvalis.blogspot.com” (o cualquier otro dominio que quiera verificar) y le debería salir algo como esto:
Traza a la dirección blogspot.l.google.com [209.85.133.191]
sobre un máximo de 30 saltos:
1 <1 ms <1 ms <1 ms 192.168.0.1
2 3 ms 2 ms 2 ms 192.168.1.1
3 42 ms 39 ms 42 ms dsl-emcali-190-99-224.1.emcali.net.co [190.99.224.1]
4 39 ms 40 ms 44 ms 172.16.1.3
5 51 ms 47 ms 53 ms 190.90.2.25
6 106 ms 104 ms 101 ms so-4-2-3-nmi-core01.nwnnetwork.net [63.245.40.157]
7 107 ms 104 ms 103 ms 63.245.5.92
8 103 ms 104 ms 103 ms 63.245.46.22
9 122 ms 124 ms 120 ms 209.85.254.252
10 123 ms 124 ms 122 ms 72.14.238.127
11 135 ms 122 ms 124 ms 72.14.236.117
12 137 ms 125 ms 125 ms 209.85.177.186
13 121 ms 125 ms 124 ms an-in-f191.google.com [209.85.133.191]
Traza completa.
Como se ve en el tercer salto, mi proveedor es Emcali, mientras que mis amigas estaban ambas usando Telmex. El marqués también estaba preocupado porque esa misma semana no lograba entrar a su blog desde la Javeriana, y lo mismo pasaba desde la Icesi. Esto me iba pareciendo cada vez más grave porque la mayoría de las universidades de Cali están interconectadas por la RUAV, cuya salida internacional es también Telmex. Que en una empresa privada le bloqueen a los empleados el acceso a los blogs pues no tiene nada de raro, sobre todo si su actividad nada tiene que ver con la información que allí se publica y más bien puede considerarse una distracción que amenaza la productividad. Pero que bloqueen el acceso a este recurso a las universidades, sí ya me parecía gravísimo y sin mayor justificación. Por eso me parecía más razonable pensar que era un problema técnico de Telmex lo que impedía el acceso a blogspot.com, más aun cuando a los pocos días se normalizó el acceso sin que en los principales medios dijeran algo sobre censura. Además, si hubiera censura estatal, lo lógico es que hubiera empezado primero con las empresas estatales como Emcali y no con las privadas de capital extranjero como Telmex.
Así lo expresé en nuestro programa de El Clavo en Radio dedicado a Internet del día 14 de septiembre de 2008. Sin embargo, en el programa dedicado a los blogs del día 21 de septiembre, el director de la Carrera de Comunicación de la Javeriana Cali, el profesor Jorge Manrique, dice que lo que había pasado en la semana del 25 de agosto era que la Fiscalía había solicitado a los proveedores de Internet bloquear el acceso porque habían detectado casos de pornografía infantil. Otro amigo me dijo que un empleado de Telmex le había contado un chisme muy similar a su hermano. ¿Dos fuentes independientes con el cuento de la censura de la Fiscalía no es mucha coincidencia?
Si esto llegara a ser cierto, ¿no sería tan grave como las restricciones a la libertad de expresión que hacen que miremos con horror a China y Cuba? Si esto llegara a ser cierto, ¿por qué no sale una sola palabra al respecto en Semana, El Tiempo, El Espectador o Caracol? ¿O es que nos están acabando la libertad de expresión como lo anticipaba Un Pasquín, sin que nos diéramos cuenta?
¿Qué fue lo que pasó la semana del 25 de agosto con el acceso a blogspot.com en Colombia?
martes, 9 de septiembre de 2008
Master of the Universe
A pesar de toda la bulla que le han hecho al enorme colisionador de hadrones (partículas subatómicas) europeo, el nuevo juguete de físicos cuánticos de todo el mundo, creo que el día de hoy será recordado por un logro mucho más impresionante.
Sí señores. Hoy, preparé mi primera olla de arroz.
Cansado de esperar a que la entropía hiciera algo útil por mi despensa, como que las moléculas del aire se organizaran espontáneamente en forma de lata de atún, me tocó tomar medidas drásticas. Salí a buscar algo que me diera la mejor relación beneficio/costo (en este caso dicha relación se traduce en sensación de llenura / precio) y lo encontré en una bolsita de media libra de arroz que espero me dure toda la semana.
Gracias a una receta de Adapar, logré preparar una comida satisfactoriamente llenadora y sin que se presentaran mis dos mayores temores: que el arroz quedara masacotudo o que se pegara a la olla. Con esto se completa la tetralogía de supervivencia que todo soltero debe conocer, y la misión cumplida me hizo sentir casi un alquimista medieval o como se sentirá el primer astrofísico que logre pillar infraganti a un agujero negro haciendo de las suyas (atragantarse a pesar de sus problemas de sobrepeso). Así que el hoyo negro que habréis de temer, no será el de Suiza sino el de este pecho ingiriendo arroz en cantidades industriales.
Porque no es por nada, pero me quedó hasta rico.
domingo, 24 de agosto de 2008
¡Prohibido beber en la calle!
Para los que no sabían, desde el año pasado hay una ley (Decreto 0352 de junio de 2007) que prohíbe la venta y consumo de licor en la vía pública (eso incluye andenes, calles y parques) en Cali.
El ideal
Personalmente, creo que la medida se queda corta y que de una vez deberíamos implantar la Sharia o ley musulmana que, entre otras cosas, prohíbe el consumo de licor (en todas partes) y que las mujeres sean vistas en público sin la burka que les tapa todo menos los ojos. Estoy seguro que habría una caída radical en las estadísticas de muertos por riñas de borrachos, en las que el primero le da un botellazo al segundo que le estaba mirando de más a la novia. También bajarían las estadísticas de muertos en accidentes de tránsito causados por conductores ebrios, porque el que quiera beber lo hará escondidito en su casa sin arriesgarse a dar papaya en la calle. Y hablando de papaya, al prohibirse el consumo de licor, los bares, estancos y discotecas se verían en la necesidad de ofrecer bebidas y cocteles sin licor, lo que dispararía el consumo de papayas, naranjas, lulos y hasta de Pony Malta, que sería lo más parecido a una cerveza a lo que la gente podría acceder. Por otro lado, la función social del trago como “embellecedor” tampoco sería necesaria porque con la burka todas las mujeres serían iguales y los tipos le caerían igual a una fea que a una bonita, fijándose más en lo que ellas dicen que en cómo lucen. Por el lado de las mujeres, sin trago que les embolate el criterio, no caerían tan fácilmente ante el baboso que les está endulzando el oído sólo para follárselas. Así también caerían estrepitosamente las estadísticas de embarazos no deseados en adolescentes. Un mundo ideal, ¿no?
(Foto tomada del International Society for Human Rights)
Pues ese escenario me trama en lo personal porque yo no necesito beber para pasarla rico en una reunión o una rumba, tampoco fumo ni manejo, así que la prohibición no me afecta en lo más mínimo. Los dueños de bares y discotecas tampoco se van a enojar con esa ley porque les quita la competencia de estancos y tiendas de barrio y les garantiza monopolio en el consumo de licor durante las noches de rumba. Los que tienen para pagar el cover de una discoteca y no bajan de botella de tequila o de whiskey tampoco se van a ver afectados, así que tampoco van a protestar. Sin embargo, hay que pensar más allá de las conveniencias personales y mirar a la sociedad en su conjunto, que es a la que afectan leyes como el decreto 0352.
Implicaciones de la Ley
Según la Secretaría de Gobierno, Convivencia y Seguridad Ciudadana Municipal, el objetivo de la prohibición es disminuir el índice de homicidios, lesiones personales y accidentes en la ciudad. ¿Y por qué con esta ley y no de otra forma? Hasta donde entiendo, uno de los detonantes fue que más de un irresponsable parquea su carro en la calle, abre las puertas, pone su reggaetón a todo volumen y se empuja varias botellas de licor, con el consiguiente caos vehicular y molestia para los vecinos.
Yo me pregunto si una prohibición será la solución. Ya sabemos lo que pasó en Estados Unidos con la prohibición del licor en la década de 1920, lo que pasa en las grandes ciudades de países sometidos a la Sharia: estimula el florecimiento de mercados negros que no pagan impuestos y generan corrupción en los agentes encargados de perseguirlos, pero no logran que la gente deje de beber. Es algo así como querer bajarle la fiebre a un enfermo con duchas frías en lugar de atacar la infección que le está causando la fiebre. Obvio que hay casos extremos en los cuales hay que acudir a la ducha fría para controlar el síntoma, pero siempre en combinación con un antibiótico que ataque la causa. Y creo que esto último es justamente lo que no está contemplando el decreto, porque el problema es que LA GENTE NO SABE BEBER y no veo que esa ley esté haciendo algo para solucionarlo.
No me parece bien que para frenar los excesos de los degenerados que se embrutecen con aguardiente o ron tengan que castigar también a los jóvenes mayores de 18 años que se toman unas cervezas con los amigos responsablemente. Además prohibiendo lo único que logran es que la gente busque la forma de no dejarse pillar bebiendo el licor que ahora se les hace más atractivo justamente porque se lo prohibieron. ¿O es que acaso no se acuerdan de cuando eran niños? A los niños (y yo creería que también a los adultos) se los educa con normas y límites, pero no con prohibiciones.
Opciones
En ese sentido me encanta la Ley Zanahoria, que no PROHIBE que la gente beba y rumbée, pero sí le pone un LÍMITE para controlar los excesos. Y claro, no faltará el que seguirá bebiendo en su casa o en Juanchito después de que lo echaron del bar o la discoteca, pero son muchos más los que paran de beber ahí y se van a comer… una hamburguesa. Tampoco se le PROHIBE a la gente que use celular, pero sí le pone un LÍMITE a su uso en teatros y salones de clase. Y por lo general la gente responde mejor que si se lo prohibieran absolutamente. Creo que ese es la forma adecuada de tratar con adultos en lugar de sólo prohibir, que seguramente luce muy bien en los boletines de prensa pero tengo mis dudas sobre qué tan efectiva será para evitar el abuso en el consumo de licor.
martes, 29 de julio de 2008
Al espacio por US$200.000. ¿Quién me presta?
Uno de mis sueños locos siempre ha sido poder ver mi planeta natal desde afuera (incluso antes de ver el capítulo en que Jean Luc Picard confiesa que ese fue quizás su momento más emocionante). Y ahora, gracias a la carrera impulsada por Sir Richard Branson y otros empresarios, vemos el primer paso concreto hacia la realización de mi sueño: una nave capaz de llevar carga (por ejemplo una cápsula de pasajeros) hasta los límites de nuestra atmósfera a un precio pagable.
Una de las empresas de Branson, Virgin Galactic (me encanta ese nombre tan sugestivo), acaba de presentar el “White Knight Two”, la nave hecha de carbono compuesto más grande que se haya construido hasta la fecha. ¿Y por qué ese material es importante? Porque hace la nave lo suficientemente fuerte y liviana como para volar muy alto sin casi despilfarrar combustible. Lograrlo es el santo grial de la carrera espacial, ya que no tienen el presupuesto gubernamental de la NASA en los años 60 que se podía permitir enormes y pesados cohetes Saturno (la mayor parte del peso estaba en los tanques y combustible y no en la navecita que era la que hacía el viaje a la Luna).
¿Y por qué digo que este adelanto me acerca a mi sueño? Pues porque ya no hay que hacer parte de una misión científica para que una agencia espacial le patrocine el viajecito, ni millonario como Dennis Tito, el primer turista que le pagó a los rusos un billete largo para que lo dejaran quedar una semanita en la Estación Espacial Internacional. Sólo hace falta que más empresas como la de Branson compitan por llevar turistas al espacio, y así se desarrolle una industria que baje cada vez más los costos, haciendo por los viajes espaciales lo que hicieron Howard Hughes (el aviador de la película de DiCaprio) y otros pioneros por la aviación comercial: gracias a ellos hoy podemos volar de Cali a Bogotá por alrededor de $200.000. Pues dentro de unos nueve meses, los primeros afortunados podrán darse su rodadita por los límites de nuestra atmósfera por módicos US$200.000, que espero sea el “techo” de las tarifas que poco a poco vayan bajando.
Bueno, pero apartándonos un poco de la parte lúdica, el turismo espacial a precios razonables tiene otros beneficios. Por un lado, los astronautas coinciden en que ver la Tierra desde el espacio cambia su percepción acerca de la fragilidad de nuestro planeta y de lo íntimamente relacionado que está nuestro destino con el del chino o el del noruego del otro lado del mundo. Permitir que más gente tenga esta experiencia posiblemente influya en acelerar el cambio de conciencia que necesitamos para poner el sentido común por encima de nuestros deseos consumistas a corto plazo. Por otro lado, si logramos que llevar y traer carga del espacio sea económicamente viable, podríamos llegar a un punto en que saliera más barato producir fuera de nuestra atmósfera esas cosas cuya fabricación contaminan. Y el argumento para que más de un gerente tome la decisión sería que sale más caro el impacto ambiental en términos de multas, de esfuerzo y, cómo no, de relaciones públicas con los consumidores (si tenemos suerte con lo del cambio de conciencia).
Pues bien, ahora sólo necesito que alguien me preste los US$200.000 del pasaje, yo se los pago cuando vuelva.
miércoles, 2 de julio de 2008
¡Rescataron a Ingrid!
Creo que en la lista de los días más felices de mi vida hay un nuevo integrante (junto con el día en que Gokú llegó a Namekuseí en “Dragon Ball Z”). A pocos minutos de conocer la noticia del éxito de la operación Jaque que terminó en la liberación de Ingrid, los tres gringos y los otros 11 secuestrados, es bastante refrescante ver que cadenas internacionales como CNN (“International” y “En Español”) están dando un cubrimiento tan amplio a la noticia. A propósito, es muy chistoso escuchar cómo al referirse a los "guerrilla leaders" de las FARC, parece que hablaran de “ ‘gorila’ leaders” . La comparación me pareció más que apropiada... ;)
Sin embargo, tengo que reconocer que mi alegría no es sólo por el bienestar de los secuestrados. En parte también tengo una razón más egoísta: ahora sí de pronto se tambalea la dictadura democrática que Uribe parece querer perpetuar por cuenta de la operación Jaque.
En primer lugar, volvió Ingrid. Seguro que esa señora va a necesitar más que electrochoques y muchas vitaminas para recuperarse de los traumas físicos y psicológicos que le debieron quedar de la experiencia. Si yo estuviera en su lugar, muy posiblemente mandaría a la mierda la política y cualquier actividad pública distinta de estar con sus hijos, su mamá y su abnegado marido. Pero hay que reconocer, que si decidiera postularse nuevamente a la presidencia, ciertamente le callaría la boca a los fanáticos que insisten en que además de Uribe, no hay NADIE capaz de dar la talla a las necesidades del país.
En segundo lugar, ahí estuvo Juan Manuel Santos, como siempre, robando cámara y ganando prensa gratis con camándula ajena (en este caso, el Ejército, que se merece todas las felicitaciones del mundo). Y un poco más atrás, están otros senadores como Germán Vargas Lleras (que renunció hace poco a su curul) y Marta Lucía Ramírez. Si hay tal cosa como una corriente ideológica detrás de la política de Uribe (que desde mi ignorancia parece más fuerza bruta que conocimiento y más improvisación que planeación) creo que los que están en plena capacidad para continuarla son estos mismos uribistas que han sido reconocidos por sus copartidarios como los más destacados. Y claro, además tendrían la ENORME ventaja de no tener encima tan insistentes indicios (fundados o no) de tener vínculos con paramilitares.
Ojalá con la vuelta de Ingrid a la vida, la gente se acuerde un poco de su lucha (que parecen conocer mejor en Francia que acá, donde Uribe es “el mejor presidente de la historia de Colombia”) y que cuando la mayoría de los políticos se hacían los locos con el elefante de Samper con tal de conservar su cuota de poder, ella denunciaba hasta el cansancio que no iba a tolerar la corrupción. Sí, Uribe ha hecho muchas cosas buenas, pero debemos dejar de mirar para otro lado cuando empiezan a oler feo las alianzas que éste ha hecho con personajes oscuros para lograr sus objetivos. Las buenas obras no deben juzgarse sólo por sus resultados, sino también por la forma como se lograron. Ojalá el regreso de Ingrid nos haga valorar más la cero tolerancia a la corrupción que ella abanderó.
domingo, 29 de junio de 2008
El hombre perfecto
Sí, yo sé que las mujeres parecen genéticamente programadas para ser exigentes. Sí, también conozco el refrán de que “detrás de todo hombre exitoso hay una mujer ambiciosa”. Pero creo que se han tomado muy a pecho la idea del “hombre perfecto”. ¿Será porque ahora las mujeres sufren del síndrome de la “mujer maravilla” (una compulsión por ser buena profesional, buena mamá, buena pareja, buena amiga e incluso lucir espectacular las 24 horas del día, todo al mismo tiempo) y buscan el mismo ideal que les impusieron a ellas? La cosa es tan exagerada ya que se sienten culpables si no son mujer maravilla (sobre todo si las formatearon en el Liceo Benalcazar).
Pues para su información, en el caso de los hombres eso no ocurre. El que es muy bueno en alguno de esas perspectivas sociales, por lo general tiene un desempeño más bien discreto en los demás, y casi siempre pasa alguno raspando y habilitando de vez en cuando después de alguna cagada. Por eso creo que este cuento del “hombre perfecto” no es más que un mito del cual más de un patán logra aprovecharse porque las mujeres están demasiado dispuestas a creerlo. Por eso yo siempre a mis amigas les digo que si un tipo se ve demasiado perfecto, una de dos: o es gay o está fingiendo con el único propósito de follárselas.
(Inspirado en una idea de Hernán Casciari: “El uno para el otro”)
jueves, 19 de junio de 2008
Los matrimonios de mis ex novias
Ya es oficial. Hoy la totalidad de mis ex novias ya han pasado (al menos una vez) por el altar. Y ya que estamos en estas, incluso las dos “tragas” no correspondidas que me atormentaron durante años también ya están casadas, varias de ellas ya con hijos. Y por alguna razón, creo que eso es motivo más que suficiente para reflexionar al respecto.
Puedo decir que todavía mantengo una buena relación de amistad con todas menos una. Aclaro que esta última se fue a vivir a otra ciudad porque el marido trabaja allá, no porque haya salido huyendo de mí (de hecho, todavía aspiro a encontrármela algún día en Facebook). Y adelantándome a los comentarios de los malpensados, tampoco hay ninguna prohibición judicial en mi contra para acercarme a menos de 50 metros de alguna de ellas.
Sin embargo, me pone a pensar que últimamente ya no me invitan a sus matrimonios. Dejo en claro que aunque usualmente me hago el loco en la lluvia de regalos, mi presencia en eventos similares ha sido todo un éxito (hasta me he ganado la liga de la novia en dos ocasiones). Es más, el último matrimonio al que asistí fue el de una pareja de muy buenos amigos, y soy tan buen invitado que aunque ir me implicó perder la única oportunidad de verme en el Petronio con una nena que me encantaba (que nunca más volví a ver) y quemar el as ganador de dar como regalo de bodas una suscripción a El Clavo (pero quedé como un príncipe, ¿cierto Yeinerzinho?), ahí estuve. Cámara en mano, peinado reluciente y zapatos de castigar baldosa. De lo que se han perdido. Más bien estoy por creer que, por allá en el fondo de su inconsciente, les aterraba que me diera por levantar la mano cuando el cura preguntara si alguien objetaba la unión (en la parte del “que hable ahora o calle para siempre”). Qué falta de confianza. La sola mirada asesina de las mamás de los novios hubiera sido más que suficiente razón para amedrentarme.
No, mentiras. Una hipótesis más razonable es que los novios prefieren invitar a los papás (porque son los que pagan), a la familia cercana (bueno, los 100 más cercanos porque toca) y a los amigos de la pareja. Como las parejas casadas suelen tener vida social es con otras parejas casadas, pues obviamente yo quedo automáticamente por fuera del parche, más o menos como se vería Gárgamel en la aldea de los Pitufos o Gustavo Petro en una convención uribista.
Pero bueno, a lo que quería llegar es que me alegra mucho saber que mis ex novias se casan. Con todas ellas fui muy afortunado, porque en su momento cada relación fue muy importante para ayudarme a ser mejor persona. Por eso, me gustaría conservar esos buenos recuerdos para siempre. Dicen los budistas que no hay mejor forma de evitar que una gota de agua se evapore que arrojándola al mar, y de manera similar creo que a las buenas experiencias vividas con ellas, ahora les corresponde hacer parte de una nueva dinámica, en una nueva etapa de la vida.
¡Felicidades!
martes, 3 de junio de 2008
Y el porno os hará libres…
Pocos mensajes han sido más re-enviados y más leídos en Colombia que el que circuló durante las primeras semanas de abril sobre Ana Karina Soto. Bueno, para ser más precisos, sobre las fotos + video porno casero de Ana Karina Soto.
A mí personalmente lo que me ofendió de este mensaje fue que, habiendo “fotos events parche 005.jpg” y “fotos events parche 007.jpg”, es claro que había por lo menos siete fotos. ¿Dónde están las otras cinco? Ya armado el escándalo, pues de una vez debieron armarlo con todos los datos necesarios para poder opinar informadamente, ¿no?
Pero bueno, lo curioso del asunto no fue que se hubiera violado la intimidad de la susodicha, sino que ella hubiera creído que al mensaje dejaría de prestársele atención negando que la de las fotos fuera ella. Seamos francos: a uno le queda la duda de si las fotos no serían un montaje malintencionado con PhotoShop, pero es que el video no deja lugar a dudas, literalmente, porque los muestra todos. ¿Qué cree que ganaba ella con eso? Si se hubiera quedado calladita, ahora sería conocida simplemente como la presentadora que tuvo relaciones sexuales prematrimoniales (como la mayoría de los colombianos). Ahora, además de eso, quedó como una mentirosa, falta de carácter y además no muy inteligente.
Obvio que ella no contaba con que algo íntimo se fuera a hacer público, pero si ya otro tomó esa decisión por ella, pues por lo menos pudo haber reclamado su derecho a hacer lo que le venga en gana en su vida privada. Como lo veo yo, lo grave no es que la gente se grabe o sea grabada en su intimidad, sino que la gente no sea consecuente con sus acciones. En últimas los valores que tenemos en más alta estima (responsabilidad, disciplina, libertad) dependen de que seamos capaces de comportarnos en privado de la misma forma como aparentamos en público. Pero si nos comportamos “bien” en privado sólo por miedo a que nos estén observando, pues no tiene chiste la tal responsabilidad y la libertad no existe porque no escogemos qué queremos hacer sino que hacemos lo que nos toca.
Hay quienes creen que si todo el mundo fuera monitoreado, no habría terrorismo, ni delincuencia, ni corrupción. Mejor dicho, un mundo una chimba mejor que la primera versión de Matrix que diseñó el Arquitecto. Pero yo creo que sería un paliativo para los síntomas, no para la enfermedad. Sofocar la privacidad trae dos problemas evidentes: el desestímulo a la diferencia y la inevitable corrupción. En primer lugar, para que la sociedad evolucione se necesita que los mutantes prueben soluciones innovadoras a los problemas, porque si todos nos comportamos de acuerdo con el mismo patrón, la debilidad de uno sería la debilidad de todos. Y en segundo lugar, ¿quién define el patrón de modelo para nuestro comportamiento? Si se necesita que alguien defina el patrón y vigile que se cumpla, ¿quién vigila al vigilante?
Creo que quien mejor retrató esta situación fue Benjamín Franklin: "Sell not virtue to purchase wealth, nor Liberty to purchase power"... Bueno, tal vez no la retrató tan bien después de todo, pero la que sí le pegó es esta otra versión de la frase que suele atribuírsele: "People willing to trade their freedom for temporary security deserve neither and will lose both" (quienes cambian su libertad por una seguridad a corto plazo no merecen ninguna y perderán ambas).
Bien, Ana Karina logró llevarnos bastante lejos. Tal vez hasta deberían darle un premio por abrirnos los ojos. Yo me conformo con que me manden las cinco fotos que nos deben.