
¿Alguna vez lo ha intimidado una página en blanco? ¿Ha  soñado con ganarse el amor y la admiración de una preciosa editora (Abbie  Cornish)? ¿Ha estado tan en la mala que siente que ya nada tiene qué  perder? Ciertamente el varado escritor Eddie Morra (Bradley  Cooper) sí, y en “Limiteless  (2011” nos muestra cómo alcanza todo lo que había soñado y sin tener que convertirse  a la cienciología.  El truco: una pastillita transparente que le permite destrabar todo el potencial  de su cerebro por un día. Naturalmente, hay gato encerrado y Eddie no tardará  en verlo venir hacia él a toda velocidad.
          Esta película, protagonizada y producida por Bradley Cooper  (famoso por las dos entregas de “The Hangover” y numerosas series de  televisión), es un maravilloso vistazo a lo que puede hacer alguien que sufre el  equivalente en un carro a un balanceo y cambio de aceite. La droga (llamada NZT-48)  no vuelve a Eddie más inteligente, sino que le permite mantenerse enfocado y que  hasta el más distante recuerdo esté disponible y organizado, facilitando la  identificación de patrones y la elaboración de predicciones. Como le dice quien  le dio su primera dosis: “funciona mejor  si eres inteligente”.
          La historia se basó en el libro “The Dark Fields” de Alan Gryn y  podría haber más de ciencia que de ficción detrás de la NZT-48 de la obra. La  pastillita transparente se parece sospechosamente al hidroclorida-dexmetilfenidato (mejor conocida como Focalin XR), que promete controlar los síntomas del  Trastorno de Déficit de Atención (¿se acuerdan del protagonista de “Calvin  & Hobbes”?) sin los efectos secundarios de sus traviesos primos Ritalin y  Concerta (hidroclorida-metilfenidato). También recuerda vagamente al Focusín con el que trataron  de controlar a Bart Simpson con resultados más bien inesperados.   
          El director Neil Burger hace un gran trabajo mostrándonos el  contraste entre la existencia gris de Eddie antes del NZT con el después, usando  acertadamente imágenes brillantes e impactantes y una estimulante banda sonora  (en la escena a bordo de un Lamborghini a toda velocidad, la música de  fondo es “La Boquilla” de Bomba Estéreo).
          En resumen, aunque la cinta es más bien predecible, no deja  de ser entretenida y emocionante, además de plantear preguntas interesantes que  posiblemente debamos enfrentar en la vida real en un futuro no muy lejano. 

7 comentarios:
Creo que en estos momentos necesito una pastillita de esas a ver si puedo terminar mi cuento o volver a mis años mozos donde tomé ritalín (http://mealonsodeapa.blogspot.com/2011/02/confieso-que-tome-ritilin.html) de todas formas gracias por decir estrictamente lo necesario hoy voy a ver la película.
Justo ayer alguien me recomendó la película y viendo hoy tu reseña, sí, definitivamente me la tengo que ver :)
Pregunto otra vez: ¿dónde se consigue esa pastillita? :D
Quiero verla y tan pronto lo haga comentaré más al respecto.
Me gusta tu reseña... definitivamente la voy a ver.
Pd: Yo hice mi tesis sobria :P
Hay que verla, buena reseña... me antojé de la pastillita...
Yo compraría la pastillita con Bradley Cooper incluido para mejores resultados, je.
Publicar un comentario